Santo Domingo. Los ejemplares del libro de memorias de María de los Ángeles "Angelita" Trujillo, hija del dictador Rafael Leonidas Trujillo, se quedaron empaquetados debajo de la oscuridad de una escalera. Su salida a la luz pública fue impedida por familiares de los ajusticiadores del tirano, quienes boicotearon su puesta en circulación anoche en el Hotel Santo Domingo.
"¡Trujillo asesino!", "¡Angelita asesina!", fue el grito que empuñaron las decenas de voces de los hijos, nietos, sobrinos y amigos de Antonio de la Maza, Luis Amiama Tió, Rafael Augusto Sánchez y Antonio Imbert Barrera. Un grito que creció gota a gota desde las 6:30 de la tarde en la puerta del hotel.
Los antitrujillistas llegaron en principio discretos, logrando pasar desapercibidos para ingresar al salón donde sería celebrado el acto, auspiciado por la Universidad del Caribe (Unicaribe).
Otros se desmontaron de sus vehículos empuñando los letreros que empezaron a abrir y en el que se leían "Respeto a los Héroes del 30 de Mayo" y "Trujillo, asesino y ladrón!"
No tardaron en expresar con palabras lo que sus carteles decían. "Han querido embarrar a nuestros héroes. Entonces, ¿nuestros nietos a quiénes les van a creer?", expresó Magda Mejía Ricart.
"Ella (Angelita Trujillo) puede decir lo que le dé la gana, pero lo que está hablando es mentira. Lo que está haciendo es una burla", sostuvo Isabel Rosario de la Maza.
Según datos adelantados del libro, Angelita Trujillo señala como responsables del asesinato de las Hermanas Mirabal a varios de los conjurados en el ajusticiamiento de su padre.
El acto que no fue
A Magda e Isabel se le fueron uniendo decenas de personas y ni la seguridad del hotel ni las advertencias impidieron que ingresaran al salón.
"¡Trujillo asesino! ¡Trujillo asesino!", gritaban mientras abrían las puertas. Dentro, unos atónitos invitados miraban al grupo ingresar. Los que discretamente entraron antes, unieron sus voces a la protesta antitrujillista.
Avanzaron hasta el podium y empezaron a entonar el himno en honor a los expedicionarios del 14 de Junio de 1959. "¡Llegaron llenos de patriotismo, enamorados de un puro ideal!", cantaban a viva voz. El Himno Nacional también fue entonado varias veces.
Los enfrentamientos verbales no se hicieron esperar. Una señora que se expresó a favor de Trujillo y llamaba al grupo "farsantes", no pudo contra la voz de los que defendían a los asesinados durante la tiranía y tuvo que salir del salón. La misma suerte corrió Julieta Trujillo, hija de Amable Romeo (Pipí) Trujillo Molina. "Creo que es una injusticia", dijo la sobrina de Trujillo.
''Ella se está acogiendo a la libertad que vive nuestro país, gracias a que hubo un grupo de hombres que ajustició a su padre'', dijo Pilar Amiama, hija de Luis Amiama Tió.
El salón se fue quedando vacío. El personal del hotel desmontó todo el mobiliario con la misma rapidez que las cajas con las memorias de Angelita fueron retiradas de la oscuridad de la escalera.
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